El 27 de enero de 2017, el Presidente firmó una orden ejecutiva, “Protegiendo la nación del ingreso de terroristas extranjeros a los Estados Unidos.” Además de tener un despliegue caótico y poco coordinado, la orden también fue víctima de varias demandas que detuvieron la implementación y el cumplimiento de la orden. El 3 de febrero, un tribunal del distrito federal en el estado de Washington emitió una medida cautelar temporal a nivel nacional. La Corte de Apelaciones del Noveno Circuito de los EE.UU. sostuvo esa decisión el 9 de febrero.
En vez de navegar el proceso judicial para defender una orden ejecutiva tan profundamente defectuosa, la administración emitió una segunda orden ejecutiva (con el mismo título que la primera). En cuestión de días, la administración desestimó la apelación pendiente de la primera orden ejecutiva en la Corte de Apelaciones del Noveno Circuito de los EE.UU.
La segunda orden ejecutiva tendría efecto el 16 de marzo y expresamente revocaba la primera orden ejecutiva. En demandas distinta, sin embargo, cortes de distrito de los EE.UU. en Hawái y Maryland ambas emitieron paros a nivel nacional de la segunda orden ejecutiva, poniendo la implementación de la orden en suspenso hasta que esas demandas sean decididas. Entonces ni la primera ni la segunda orden ejecutiva están en efecto y siendo implementadas.
¿Qué intenta lograr la segunda orden ejecutiva?
Prohíbe entrada a los EE.UU por al menos 90 días a inmigrantes y visitantes de Siria, Irán, Somalia, Libia, Sudan y Yemen (pero exime a residentes permanentes legales y a gente de doble nacionalidad viajando con un pasaporte de un país no incluido en la lista de seis países);
Suspende el restablecimiento de refugiados en los EE.UU. por 120 días y reduce la cantidad de refugiados que el Programa de Admisiones de Refugiado de Estados Unidos (en inglés United States Refugee Admissions Program, USRAP) va a restablecer en el año fiscal 2017 de 110, 000 a 50, 000;
Suspende el Programa de Exención de Visa (a menos que una entrevista no sea requerida por estatuto o de alguna otra manera este exceptuada por la Orden) y requiere entrevistas en persona para la mayor parte de solicitantes de visas de no inmigrantes;
Requiere un proceso de selección y validación estándar para identificar a individuos que buscan entrar a los EE.UU. por medio de fraude, apoyan el terrorismo o violencia o presentan un riesgo de causar daño posterior a su entrada a los EE.UU. ; y
Requiere la implementación inmediata de un sistema de entrada y salida biométrica.
Los abogados en Antonini & Cohen
Antonini & Cohen mantendrá a nuestros clientes y amigos informados de cualquier desarrollo en relación a las demandas en torno a la implementación de la segunda orden ejecutiva de la Administración. Mientras tanto, urgimos a todos los extranjeros con elegibilidad para cualquier beneficio migratoria a proceder con someter sus solicitudes. Contáctenos para que podamos evaluar sus circunstancias y aconsejarle si califica para estatus migratorio o algún otro beneficio.